domingo, 20 de febrero de 2011

How To Dismantle An Atomic Bomb

Cuando no han pasado ni ocho meses desde el Camino a Javier, ya se está de nuevo preparando la vuelta.

Quizás porque el Mundo Rural, cuando es de verdad atrae mucho, o por no haber estado nunca en un lugar así, pero algo cambia. Cuando se cae en la rutina y cuando llueven las señales que animan a salir de ella, sea como sea si no se dá el paso corres el peligro de quedarte en el mismo lugar o en el mismo tiempo mientras todos viven en el futuro. Y todo eso significa Javier, salir de las murallas que uno mismo se ha creado y salir a descubrir todo lo que espera fuera, a veces por ti y otras por los demás, pero los cambios muchas veces son necesarios, sin tener que dejar atrás nada porque en el fondo aferrarte a lo que tienes, lo que crees que has conseguido, es no tener nada, corres el peligro de ser igual para siempre.

Cuando empiezas un camino te marcas una meta, pero siempre tras una meta hay otra mas lejana y quedandote parado no consigues nada mas que volver al principio del camino, es como si todo lo andado de repente no tuviese sentido haber llegado asta allí, vivir en el camino es conseguir nuevas metas, descubrir nuevas personas, lanzarte a hacer cosas que los demás no ven posibles.

Por eso cuando todo lo que se había vivido parecía olvidado, vuelve con mas ganas, recuerdas porque te pusiste a andar, recuerdas que todo estaba a punto de irse a la mierda y  una decisión tomada sin pensar te condujo a que las cosas se enderezasen más que nunca, y aunque en estos momentos todo el mundo está preparando el futuro sin saber muy bien que hacer yo solo tengo una cosa en mente, si el año pasado supo a mucho este quiero que sepa a más, aunque ni siquiera el tiempo sea capaz de abarcar todo lo que voy ha hacer, yo conseguiré cumplirlo.

Que más se puede decir:  I’m living in the future so the present is my past, my presence is a present, kiss my ass.

Y Recordar a Spotify que en los 80' no me podia gustar Roxette porque no habia nacido.

Dedicado a Glo y a su Incierto Verano.

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